DE ACUERDO AL RELOJ QUE MARCA EL RITMO DE TU VIDA.

Escribir, para mí, es cuestión de varios elementos. Inspiración (el cual se manifiesta en una serie de pensamientos profundos mezclados con una sensación intensa de ahogo). La canción perfecta a ese desahogo (la cual escucho al momento de escribir, pero ya he venido escuchando durante varios días). Para el momento de escribir, ya tengo claro qué es lo que dicha canción me produce y cómo esto está relacionado al tema. Y, el ambiente del lugar. (Normalmente, no pienso en qué lugar quiero escribir, sino que cuando llego a un lugar y conecto con el mismo, y ello con las emociones e ideas que he venido cocinando, entiendo que es en ese lugar y en ese momento dónde debo escribir). Hoy, sin embargo, aunque tengo la canción, tengo el lugar, y tengo las ideas; tengo también otro elemento... ¡Miedo! Tengo miedo de expresar lo que pienso... tengo miedo de dejarme llevar por las ideas embotelladas... tengo miedo de quitar el tapón sin querer quitarlo. Tengo miedo de mi arrogancia y de mi vul...